Penúltimo viaje a la Sierra de Albarracín en un día espléndido; como se suele decir ni frío ni calor, excelente para la pequeña andada que íbamos a hacer por los Ojos del Cabriel:
¡Ojito, ojito!
MOSCARDÓN
Los orígenes de la localidad podrían situarse a finales del s. XII con la conquista cristiana y posterior repoblación de la serranía con gentes de Navarra
Gentilicio: Moscardonense
Población: 58 Hab.
Altitud: 1405 msnm
En esta ocasión, dada la duración del viaje almorzamos a orillas del río Guadalaviar pasado Albarracín; así que nada más llegar a Moscardón ya estábamos trotando calle arriba hacia la Iglesia de San Pedro, situada justo donde termina el pueblo, al borde del precipicio del Barranco del Castellar.
El posterior callejeo nos llevó a la plaza del ayuntamiento y la Casa Consistorial que aún conservaba su lonja de dos vanos, aunque naturalmente se accedía a través de ellos al bar donde tomamos un cafelito reponedor.
Sabíamos de la existencia del Pino Gordo, pero como suele ser más habitual de lo que quisiéramos, tampoco lo supimos encontrar, como tantas ermitas, molinos, y otros edificios de interés que te informan de su existencia pero no de su ubicación, en las páginas de internet. ¡Nunca me cansaré de solicitar a todo el que informa de algo, que incluya un plano de localización!
TERRIENTE
Gentilicio: Terrientino
Población: 178 Hab.
Altitud: 1443 msnm
Precisamente en Terriente en su página www.terriente.es, encontré un sencillo plano (¡aplausos!) que nos iba a servir para visitar plácidamente y sin incertidumbre la localidad y sus lugares de interés. que son muchos, pues posee un conjunto urbano de lo más interesante.
Nos sorprendió agradablemente lo cuidado de sus calles y la abundancia de macetas, así como zonas ajardinadas de diseño, sin duda entre sus vecinos debe haber alguien experto en jardinería.
En cuanto al ayuntamiento, destaca su balcón de madera encima de la Lonja de dos ojos, que le confiere una personalidad propia con respecto a otros edificios de esta tipología.
Sobre las doce y media abandonamos Terriente y sus casas de arquitectura popular de mampostería, con enrejados adornados con gran profusión de hermosas macetas.
TORIL Y MASEGOSO
Se constituye
como Ayuntamiento en 1834. Tras varios cambios de denominación, desde 1920 se denomina Toril y Masegoso
Gentilicio: Torilenses
Población: 30 Hab.
Altitud: 1490 msnm
Si bien la iglesia Parroquial se encuentra en el núcleo del Masegoso, Toril cuenta con una iglesia cuyos orígenes datan de una ermita del s. XVII, dedicada a los santos ¡Abdón y Senén! no negareis su originalidad; y no solo por sus nombres si no porque actualmente no se les reconoce como santos por la iglesia católica al no saberse nada de su existencia real.
Con estas imágenes de la fuente de Toril, y el abrevadero y fuente de Masegoso, abandonamos este curioso pueblo partido en dos.
Gentilicio: Vallecillense
Curioso los orígenes de El Vallecillo: "En el molino San Pedro se centró la actividad económica más destacada. Primero el molino harinero y de sierra propiedad de la familia Cavero (existe un documento fechado el 18 de febrero de 1505 donde Mateo Cavero lo arrienda a Machín Doñate, vizcaino, por 5 años y 12 docenas de ripias o costeras). Después la herrería fundada en 1526.
Y así surge Val Longuiello (El Vallecillo) cuando los renteros de las masías limítrofes propiedad de la sociedad dominante deciden agruparse en un núcleo rural para defender sus intereses y recibir unos mejores servicios. Pero se trata de vecinos asalariados sin propiedades. Todavía no tendrán jurisdicción propia porque hasta el siglo XIX el Vallecillo no se incorpora como aldea independiente de Frías dentro de la Comunidad de Albarracín." (elvallecillo.es)
El municipio de Toril y Masegoso está formado por dos núcleos de población separados por 1200 metros en línea recta, ambos tienen la categoría de municipio y ninguno es pedanía del otro, en una singularidad creo, única.
Con estas imágenes de la fuente de Toril, y el abrevadero y fuente de Masegoso, abandonamos este curioso pueblo partido en dos.
EL VALLECILLO
Val Longuiello (El Vallecillo)
Población: 60 Hab.
Altitud: 1421 msnm
Y así surge Val Longuiello (El Vallecillo) cuando los renteros de las masías limítrofes propiedad de la sociedad dominante deciden agruparse en un núcleo rural para defender sus intereses y recibir unos mejores servicios. Pero se trata de vecinos asalariados sin propiedades. Todavía no tendrán jurisdicción propia porque hasta el siglo XIX el Vallecillo no se incorpora como aldea independiente de Frías dentro de la Comunidad de Albarracín." (elvallecillo.es)
Cerca de las dos y medía eran cuando llegamos a El Vallecillo después de ver la Cascada del Molino, así que nos dirigimos directamente a comer al Hostal Ojos del Cabriel antes de visitar el pueblo
El paseo después de la comida fue un tanto pesado pues el día calentaba, nos ayudó la brevedad del mismo pues apenas destacan un par de plazas y la
trilogía, iglesia, ayuntamiento, ermita..
Sin duda la atracción principal del municipio son los parajes de la Cascada del Molino de San Pedro y el Ojo del Cabriel que os presentamos seguidamente.
CASCADA DEL MOLINO DE SAN PEDRO
Y OJO DEL CABRIEL
El salto, de unos 12 m se produce en formaciones calcáreas del Cretácico superior con estratos inclinados en sentido contrario a la corriente de agua del río, lo que incrementa el resalte morfológico de la cascada. Al pie se genera una enorme y profunda poza de agua desde la que puede verse el acueducto que llevaba el agua del río al molino de San Pedro.
Resalta
la presencia de una ribera densa de sauces, fresnos y chopos que
contrasta con el paisaje del entorno dominado por pino royo o albar y
la sabina, sin apenas sotobosque. Junto al molino existe una chopera
de repoblación. Próximos al río hay abundantes juncales y
carrizales, y en la roca los musgos recubren las paredes
travertínicas.
El río Cabriel es un afluente del Júcar que nace en los Montes Universales en el llamado “Ojo del Cabriel”, manantial al que se puede acceder desde la localidad de El Vallecillo. Esta surgencia nos lleva por una senda a la Cascada del Ojo del Cabriel, un imponente salto vertical.
Y con las cascadas en mente, para ayudarnos a hacer el viaje más refrescante, emprendimos el regreso a Zaragoza.
