sábado, 1 de marzo de 2014

DECIMONOVENO VIAJE: BAJO ARAGÓN (III) 22 de Febrero de 2014



¡Tremendo, el paso del tiempo! que lejano en el calendario está aquel 27 de Agosto de 2011 cuando iniciamos nuestros viajes y que cercano en la memoria; pero aquí estamos, dispuestos a comenzar la temporada del año 2014 con 84 pueblos ya visitados. 


Inédita composición de viajeros en este decimonono viaje, en el que visitaremos solo tres pueblos, dado que Alcañiz requiere una dedicación especial; así que tras partir media hora más tarde de lo habitual debido a la época del año (es nuestro primer Febrero viajero) nos plantamos cómodamente en

     TORRECILLA DE ALCAÑÍZ


 Gentilicio: Torrecillano
 Población:437 hab. (2013)
 Altitud: 446 m.s.n.m

Que clase de gente seríamos si a la primera estampa de este día del  casi vencido invierno le robáramos la presencia del almendro en flor, protagonista único de los campos en esta época del año, así que aquí está presidiendo en un cerro en una mañana fresquita pero sin rocío, como atestiguan los marrones campos labrados a sus pies, esta primera imagen de Torrecilla.

El almuerzo, esta vez no os lo vamos a mostrar pues se conjugaron en él todas las desgracias, el lugar con unos aperos de cosechadora y un remolque, las fotos infames que resultaron, y un fallido vídeo que no llegó a ser, nos hace desistir de ello, así que vayamos a la plaza de España donde si merece la pena detenernos.


 Desde el ayuntamiento asomándonos a la calle San Roque, ya divisamos la bella  torre de la iglesia de tipología mixta con un cuerpo inferior de planta cuadrada de piedra al que se superponen tres cuerpos ochavados de ladrillo, hacia la que nos dirigimos a lo largo  de esta calle, descubriendo en una hornacina la imagen del santo del mismo nombre poco después de una panadería, donde alguna viajera hizo acopio de un par de panes. Que yo sepa nada que ver con el santo en la hornacina, en asuntos gastronómicos creo que el entendido es  San Antón, San Roque con la pierna al aire es un poco más escabroso... 


 Por lo demás bonito pueblo Torrecilla, veamos para finalizar algunos trazos de su arquitectura


Espléndida luz la que nos brindó la mañana para las anteriores fotos, gracias a ella echamos menos en falta las super reflex de Julia o Mariví.. y sin más emprendimos viaje hacia

CASTELSERÁS

Su topónimo procede seguramente del antiguo asentamiento ibero, Castrum-Zerás,
 o Castro del León

 Gentilicio: Castelserano
 Población:833 hab. (2013)
 Altitud: 382 m.s.n.m

La calle Mayor de Castelserás recorre el pueblo de norte a sur, partiendo de la plaza del Puente, y sube paulatinamente hacia el Portal Alto; como es tan larga, primero la bautizaron como Mayor Baja para a partir de la plaza del Ayuntamiento cambiar de denominación a Mayor Alta, en torno a ella se hallan los edificios más sobresalientes; empezamos nuestra visita en los soleados arcos de la Lonja antesala del ayuntamiento, para subir por la empinada calle de la Virgen hasta la iglesia  


Como es nuestra costumbre, salvo alguna excepción, no visitamos la iglesia por dentro, porque también como es habitual estaba cerrada; en cambio tras indagar por la casa de la Encomienda y subir de nuevo por la calle Mayor hacia su encuentro, si encontramos abiertos los sendos museos dedicados a la Botánica, en honor de Pardo Castrón y Loscos en la bodega, y al pintor Vaquero Foz en la planta baja. 


Pero veamos como se explica la amable cicerona que tuvimos la suerte de encontrar
De visita en el museo

El retorno hasta el puente y su entorno dada la longitud de la calle Mayor como queda dicho, dividió a los viajeros en dos grupos a semejanza de un encierro sanferminero, salvando las distancias naturalmente, ¡los toros son más rápidos! 


Allí contemplamos el conjunto urbanístico de El Puente: azud, acequia, molino, lavador, parque botánico, y junto al río Guadalope la "Casa Grande" o "el Castillo" para después al alejarnos del pueblo, en una loma hacer la foto panorámica que abre este relato.
Abandonamos Castelserás altamente satisfechos y nos dirigimos presurosos a la ciudad de   


ALCAÑIZ

Su topónimo, de origen árabe, alude al cañizo o a la caña, presente en su escudo
 Gentilicio: Alcañizano
 Población:16384 hab. (2013)
 Altitud: 340 m.s.n.m






La visita a Alcañiz la teníamos clara, antes de comer al Castillo; así que allí nos dirigimos por la avenida de Aragón, donde tuvimos la sensación por primera vez en nuestros viajes de estar en una ciudad, se notaba el dinamismo propio de estas, frente a la parsimonia de los pueblos donde todo va más despacio. El castillo lo podemos dividir en dos partes, una el Parador donde ni siquiera entramos al bar y la otra la parte norte que visitamos, donde un excelente guía con una  entusiasta y amena erudición, nos ganó a todos para la causa y nos entretuvo durante una hora y media larga en apenas dos estancias y un pequeño claustro. Chapeau.








Un poco de erudición




Fin de la erudición

Apenas sin darnos cuenta nos dieron  las dos y media, así que sin pérdida de tiempo bajamos por la cuesta de la Encomienda hasta la plaza del Mercado donde en tan apropiado lugar se emplazaba el restaurante Guadalope que nos acogió generoso con excelentes viandas y correctos caldos.



   
Después de bien comidos y apenas sin descanso, contemplamos la señorial estampa de las plazas de España/Mercado repletas de bellos edificios... el teatro municipal, la Excolegiata de Santa María la Mayor, el antiguo mercado, la Lonja gótica, el ayuntamiento... se diría que han lanzado en un puñado desde el Castillo todos los edificios notables de Alcañiz a este lugar.



Enseguida nos dirigimos a la oficina de turismo desde donde iniciamos un recorrido por el casco histórico con un guía también, dada la grata experiencia del castillo; si en el barrio norte de la ciudad hallamos dinamismo y vida, aquí encontramos vacío y abandono, quizá debido a la maldita crisis a la que culpaba el guía, de haber obligado a cerrar espacios expositivos y abandonar múltiples rehabilitaciones necesarias. No obstante pudimos deleitarnos con algunos palacios perfectamente reformados que jalonan la calle Mayor, esta si, portando gran lustre.






   En el refugio antiaéreo


De vuelta a la oficina de turismo para finalizar la jornada visitamos los subterráneos medievales que se encuentran en los bajos de la misma, donde se han excavado ya varios kilómetros aunque nosotros recorrimos alguno menos


Paseo subterráneo (¡pero bueeeno que largo es estoo!)

Al abandonar Alcañiz nos alejamos carretera arriba hacia Caspe buscando alguna vista de la ciudad menos conocida, el lugar lo encontramos he hicimos la fotografía con alguna aventurilla a la que se refiere el título del pequeño vídeo con el que cerramos este viaje; 


 ¡Lo que pudo haber sido!