miércoles, 9 de septiembre de 2015

TRIGÉSIMO CUARTO VIAJE: JILOCA (y VIII) SIERRA DE ALBARRACÍN (I) 29 de Agosto de 2015




Como el día es ya más corto y las distancias adonde nos desplazamos más largas, volvemos a poner la hora de salida a las ocho para iniciar la visita a la comarca de la Sierra de Albarracín, terminando antes la del Jiloca de una manera brillante, pues nos  despediremos de ella rematando con el precioso castillo de Peracense.
Pero antes nos acercaremos a 
SINGRA

   Gentilicio: Singrano
   Población: 76 Hab. (2014)
   Altitud: 1047 m.s.n.m

En Singra estuvimos acompañados primero en el almuerzo, por el dueño de uno de los múltiples palomares que se divisaban en el cerro de la ermita de Santa Bárbara, y después de ver la iglesia a la que sirve de campanario el único torreón que queda en pie del antiguo castillo fundado por Alfonso I, buscando la Carretería topamos con el propietario actual de la misma


con el que nos fotografiamos en el imponente arco de sillería realizado en piedra de rodeno de la entrada principal, donde se puede ver la inscripción "1920 CARRETERÍA/JULIO BUGEDA".  


Con la visita a los clásicos  lavadero, abravadero y  fuente, nos marchamos de Singra camino del último pueblo de la comarca del Jiloca que nos quedaba por visitar



PERACENSE
El nombre de Peracense proviene de Peracens o "Pietra Solez", aunque se han recogido denominaciones como Piedrasolez, Piedraselz, Perasenz y Perasens.
   Gentilicio: Peracensino
   Población: 69 Hab. (2014)
   Altitud: 1217 m.s.n.m


       
  Peracense está dominado al sur,  por el Castillo homónimo y al oeste por la mole del cerro de San Ginés de 1613 metros de altura, conocido como el mirador del Jiloca al que se va en, suponemos, fatigosa romería. 
Entramos por el norte a la localidad y de frente aparece la iglesia a la que te diriges sin bajar del vehículo, por lo que si no te das cuenta pasas de largo a la izquierda la casa Don Pepe, sin duda el elemento de la arquitectura civil más destacado del núcleo urbano de Peracense.



       Después de tomar un café en el bar Ramiro, conocimos el ayuntamiento y la fuente, bajando por la calle de la Iglesia, antes de dirigirnos impacientes al castillo. 

CASTILLO DE PERACENSE



         El castillo de Peracense se asienta sobre una prolongación rocosa de rodeno, en las últimas estribaciones de Sierra Menera, que le confiere ese característico color rojo de dicha piedra arenisca.
       Aunque el solar del castillo ya se ocupó en la Edad del Bronce, y posteriormente en época islámica en los siglos X y XI, no fue hasta mediados del siglo XIV cuando adquirió sus actuales dimensiones.
     Todos estos datos y más sobre el castillo los podéis encontrar en este enlace de la página del ayuntamiento de Peracense 
http://www.peracense.es/InternetRural/peracense/home.nsf/menu/castillo


El estado actual del castillo que nosotros pudimos disfrutar, se debe a la restauración realizada en 1987 por el Gobierno de Aragón, en parte para paliar en la medida de lo posible, el desempleo producido por el cierre de las minas de Ojos Negros.


   
Y este fue el digno broche que dimos a la comarca del Jiloca, antes de dirigirnos al primer pueblo de la comarca de la Sierra de Albarracín.

RÓDENAS
Su nombre deriva de la piedra rodena-arenisca de color rojizo
   Gentilicio:Rodenero
   Población: 75 Hab. (2014)
   Altitud: 1380 m.s.n.m
 
Todo el pueblo está construido en mampostería de este tipo de piedra (rodena-arenisca) lo que le da un aspecto original y único que lo convierten en una de esas  pequeñas maravillas que de cuando en cuando nos encontramos por Teruel.



Recurramos al tópico y digamos que una imagen vale más que mil palabras; ni una sola dijimos mientras recorríamos las rojas calles del pueblo a pleno mediodía todavía de Agosto.



Donde no pudimos evitar unas palabras de admiración fue en el conjunto de "La Cisterna" árabe del siglo IX que todavía se conserva en Ródenas; una curiosa construcción de aljibe de sillería, que recoge el agua por unos canalillos labrados en la gran losa de rodeno en pendiente que lo precede.


POZONDÓN
Hubo en Pozondón un gran pozo, que puede que diera pie a su nombre de lugar.


   Gentilicio:Pozondonense
   Población: 63 Hab. (2014)
   Altitud: 1407 m.s.n.m
El casco urbano de Pozondón, está presidido majestuosamente por la torre de aspecto defensivo de la iglesia de Santa Catalina. Esta torre es lo primero que se divisa del pueblo desde cualquier punto que nos acerquemos a él, incluso hasta que estás bien cerca es lo único que se ve, dada la llanura que lo circunda.


Todo en Pozondón gira alrededor de la iglesia, tan solo el ayuntamiento situado al sur en una gran plaza, donde se haya soterrado un depósito de agua ("El Aljibe") construido en 1931, le quita protagonismo, ayudado sin duda porque en la lonja se haya el bar del pueblo, lugar de encuentro de los pozondenses y los numerosos forasteros que tuvimos ocasión de contemplar.

   Marcaban las dos menos veinticinco en el reloj del ayuntamiento, cuando iniciamos el camino de regreso hacia la iglesia y el Centro de Interpretación de la Arquitectura Tradicional del Parque Cultural de Albarracín, que no pudimos visitar pues cerraban justo antes de llegar nosotros, desde donde iniciamos el viaje hacia



BRONCHALES
El origen de Bronchales, puede remontarse con toda seguridad, a tiempos iberos y romanos. Así lo atestiguan los diferentes yacimientos encontrados en el término (destaca el de "El Endrinal") .
Posteriormente, en el "Cantar de Mio Cid", podemos encontrar una referencia clara a Bronchales, verso 1475: "Trocieron a Santa María (Albarracín) e vinieron a albergar a Fronchales (Bronchales).

   Gentilicio:Bronchalenses
   Población: 427 Hab. (2014)
   Altitud: 1569 m.s.n.m.
  Bronchales es el cuarto municipio más alto de Aragón, ya visitamos el primero y el tercero (Valdelinares y Gúdar) y aquí en la Sierra de Albarracín también conoceremos el segundo: Griegos.
  El interés principal de Bronchales son sus pinares y las múltiples fuentes que en ellos se encuentran que  hacen de este municipio uno de los más visitados para estancias veraniegas. Sin embargo el núcleo de población, principal objeto de deseo de nuestros viajes,  no destaca especialmente por su arquitectura, y no me refiero a la arquitectura religiosa pues la iglesia y las ermitas no faltan como en otros pueblos, si no a la arquitectura civil sin una identidad propia y sin uniformidad, debido a construcciones hechas  sin ninguna planificación estética, como ocurre en este tipo de poblaciones fruto del boom turístico.


Decir que lo primero que hicimos al llegar, fue dirigirnos al hostal-restaurante Santa Isabel, donde en un menú económico tuvimos ocasión de degustar un guiso de ciervo típico del lugar. 


El recorrido por las calles nos llevó allá arriba a la ermita de Santa Bárbara desde donde disfrutamos de una excelente vista panorámica; con una visita a la oficina de turismo y un recorrido con el coche por los pinares y una de sus fuentes, abandonamos Bronchales hacia nuestro último pueblo del día

MONTERDE DE ALBARRACÍN
 El origen de Monterde se remonta a la época de la reconquista y procede según la tradición, de la donación que hizo Don Pedro Ruiz de Azagra de una alquería musulmana a un caballero llamado Monterde.
   Gentilicio:Monterdinos
   Población: 73 Hab. (2014)
   Altitud: 1280 m.s.n.m.
     "En 1565 el concejo de Monterde concertó con los maestros Juan Alonso de Hontanilla y Pedro de Cubas la construcción de la cabecera de la iglesia de la Asunción. Al año siguiente, al caer enfermo Juan Alonso de Hontanilla, traspasó la dirección de las obras a su hijo, de igual nombre. Una vez terminada la cabecera se decidió continuar con el resto de la iglesia, pero en plenas obras en 1600 y todavía en 1618 aún estaba sin terminar. La iglesia resultante es de una nave cubierta con bóveda de crucería estrellada, en estilo tardo-gótico, capillas entre los contrafuertes y cabecera poligonal. La bella portada clasicista se cobija en un atrio que ocupa dos tramos de la nave lateral. También a los pies en el lado opuesto se alza la sólida torre cuadrada que se remata con un cuerpo octogonal."

http://www.comarcadelasierradealbarracin.es/index.php/haz-turismo-en-la-comarca-de-albarracin/conoce-la-comarca/municipios-de-la-comarca/2014-04-16-14-23-9/2014-04-16-14-23-24

Este texto extraído de la página de la comarca, describe el principal atractivo de este pueblo dividido por el pequeño río Manzano, al que llegamos a última hora de la tarde y abandonamos por un bonito cañón surcado por este río.


  Para finalizar este reportaje de finales de Agosto que mejor que escuchar mientras volvemos a Zaragoza a José Antonio Labordeta en esta agostada de sus primeros tiempos. ¡Grande Labordeta!, una figura que no me cabe duda se agrandará con el tiempo.

Cuando se agosta el campo (J.A.Labordeta)