martes, 31 de mayo de 2016

TRIGÉSIMO OCTAVO VIAJE: SIERRA DE ALBARRACÍN (IV) 24 de Mayo de 2016


Nuevo viaje entre semana, en esta ocasión martes; a partir de ahora esto será más habitual ya que podemos permitírnoslo algunos viajeros, bien por estar ya jubilados o por poder coger fiesta con facilidad.

FRÍAS DE ALBARRACÍN
 Gentilicio: Friolero
 Población: 131 Hab. (2015)
 Altitud: 1496 m.s.n.m
Más de sesenta fuentes manan en el término de Frías, encrucijada de caminos de tres provincias; bellos paisajes los que atravesamos antes y después de visitar su núcleo de población donde destaca la iglesia de la Asunción de estilo neoclásico, después de almorzar en un parque al sur de la población, con aparatos gimnásticos y caballos incluidos...




Las casas de Frías están encaladas cual si de un pueblo del sur de España se tratase, y como es habitual en los pueblos con pinares, el municipio se financia con la explotación de los mismos, siendo escasos o nulos los impuestos a sus vecinos.

Abandonamos el adoquinado pueblo de Frías, sin pasar por el nacimiento del Tajo que fue motivo de visita en otra ocasión, por la carretera que va directa a

VILLAR DEL COBO
El pueblo se asienta en la ladera de Las Peñas, al lado de La Lobera y enfrente de una de sus dehesas

 Gentilicio: Villarense/Villarenco
 Población: 189 Hab. (2015)
 Altitud: 1419 m.s.n.m
La primera imagen de Villar del Cobo que divisamos, ubica al pueblo en un gran hoyo, sensación que a medida que nos acercamos resulta engañosa pues en realidad se asienta en una ladera a cuyos pies discurren los ríos Guadalaviar/Turia y Griegos/Búcar; precisamente cerca de uno de los puentes, junto a la iglesia de finales del siglo XVI, aparcamos el coche para dirigirnos a tomar un café antes de visitar el pueblo. 


Ya veníamos advertidos de la lamentable reforma del ayuntamiento en 1966, afortunadamente pudimos encontrar en el recorrido por el pueblo, algunas casonas nobles que conservaban su porte original y otras aunque reformadas, sin atentar contra el buen gusto.


Placentero fue el paseo  por las calles del pueblo, pues la mañana era agradable, aunque como suele ser habitual apenas nos encontramos con dos personas, a excepción de cuando estuvimos tomando el cortado en la tienda/bar/estanco/fonda de la calle del Rincón, que por cierto estaba buenísimo. 

GUADALAVIAR
Guadalaviar al igual que Griegos fue una aldea dependiente de Villar del Cobo
 Gentilicio: Guadalaviaros
 Población: 247 Hab. (2015)
 Altitud: 1519 m.s.n.m
Alrededor de la iglesia gótica del siglo XVII se hallan las construcciones principales de Guadalaviar, incluidos el ayuntamiento y la sede del Museo de la Trashumancia, -que lamentablemente no pudimos visitar pues solo abrían los fines de semana-, presididos todos ellos por el espacio de la plaza Mayor.


Desde la plaza Mayor, callejeando y no sin preguntar, llegamos al oeste de la población donde se encontraba la famosa plaza de toros excavada en la roca que de no ser por el caballo que deambulaba plácidamente por su interior y al que le dedicamos varias carantoñas, nos hubiera decepcionado, si bien es verdad que entre mis preferencias no se haya, la mal llamada fiesta nacional. 



Y con esto terminamos de conocer Guadalaviar, al menos un poquito y partimos hacia Griegos donde teníamos previsto comer. 

GRIEGOS
Segóbriga, pueblo celta, es el punto de origen del lugar enclavado en el Cerro de la Cabeza de Griegos

 Gentilicio: Grieguenses
 Población: 157 Hab. (2015)
 Altitud: 1601 m.s.n.m

Había cierta expectación por entrar en el pueblo "más frío de España" a decir de ciertas fuentesasí que nada más aparcar el coche en la calle La Fuente, entramos directamente en el restaurante "La Muela de San Juan" para coger energías y a fe que las cogimos pues tres de nosotros se metieron entre pecho y espalda unas judías con oreja, de ración generosa. 


Por lo demás la comida resultó placentera y agradable, amablemente servida por Ernesto, el propietario del local.



Griegos escultóricamente se resume en la iglesia de San Pedro del siglo XVI y la ermita de San Roque del XVII aunque muy reformada hasta nuestros días.


 

Después de ver la ermita dirigimos nuestros pasos  a la famosa Muela de la que toma nombre el restaurante, tras la insistencia de su dueño (del restaurante, no de La Muela) que nos lo recomendó encarecidamente; Queda constancia de la visita, con la fotografía panorámica que mostramos arriba.
Y desde la Muela a más de 1800 metros de altitud, abandonamos el segundo pueblo más alto de España camino de

ORIHUELA DEL TREMEDAL


 Gentilicio: Oriolano, orihuelano
 Población: 539 Hab. (2015)
 Altitud: 1447 m.s.n.m
En Orihuela la visita iba a ser de lo más cómoda y sin pérdida, ya que previamente Dori había quedado con su amiga Rosita, quien gustosamente nos iba a servir de guía, con la pasión que ponemos en enseñar nuestro pueblo como ya tengo dicho en otras ocasiones. 


Orihuela es sin duda el pueblo más interesante arquitectónicamente hablando de los vistos durante el día. Fuentes, Peirones, Iglesia, Ayuntamiento, Casas Señoriales, nada se nos escapó comenzando por la calle Centro hasta la calle Santa Lucía, para desde el peirón del mismo nombre y la fuente del Gallo iniciar la subida a la iglesia por la calle del Horno.


La iglesia parroquial de San Millán ha sido declarada Monumento Nacional y está considerada la más bella del barroco de la provincia, y sorprendentemente, después de ver los atentados contra el arte de muchas de las reformas realizadas durante el pasado siglo en nuestros monumentos, la que realizó el arquitecto Carlos Carbó en 1980 en esta iglesia, fue un acierto ya que recuperó los colores primitivos con que fue decorada, ¡se libró del enyesado!


Del mismo modo que Ernesto, en Griegos, insistió que subiéramos a la Muela de San Juan antes de irnos, Rosita no cejó hasta que nos convenció para que subiéramos al Santuario de la Virgen del Tremedal, donde nos acompañó por supuesto, para disfrutar de una vista similar a la de Griegos aunque obviamente con pueblo diferente allá abajo.


Y esto es todo por este viaje, buenas noches y buena suerte.