Largo invierno el que nos ha tocado vivir este año, pero por fin hemos conseguido vencerlo y aquí estamos apenas llegada la primavera, con las fuerzas intactas y la ilusión desbordante dispuestos a continuar nuestros viajes por tierras teruelanas, como dice la jota.
De donde mana el querer,
en Teruel hay una fuente,
donde van las teruelanas y olé
mañica, por la mañana a beber
El viaje en esta ocasión tiene algo de excepcional pues por primera y única vez llegaremos a nuestro destino por carreteras secundarias de los Campos de Cariñena y Daroca, ya que es el camino más corto; lo que perdemos en la rapidez de la autovía lo ganamos disfrutando del paisaje, que debido a las abundantes lluvias de los últimos días parece de tierras escocesas, tal es el verdor de los campos jalonados por múltiples riachuelos y balsas de agua que encontramos a nuestro paso.
NOGUERAS
Sus orígenes son medievales. perteneció a la Comunidad de Aldeas de Daroca hasta el siglo XIX
Población: 30 hab. (2014)
Altitud: 831 m.s.n.m
Altitud: 831 m.s.n.m
Entramos en Nogueras por el denominado Barrio Curto, que nos condujo a orillas del río Cámaras donde en una mañana espléndida almorzamos plácidamente junto al puente de piedra con tajamales del año 1919.
A estas horas de la mañana y bien almorzados, los viajeros todavía estaban descansados, así que antes de abandonar Nogueras se ejercitaron alegremente en un parquecito detrás de la iglesia, equipado con aparatos gimnásticos.
SANTA CRUZ DE NOGUERAS
Sus orígenes son medievales. perteneció a la Comunidad de Aldeas de Daroca hasta el siglo XIX
Población: 42 hab. (2014)
Altitud: 894 m.s.n.m
Altitud: 894 m.s.n.m
Remontando
el río Cámaras por su margen izquierda, escoltados por los
encinares a nuestra derecha, y pequeños sotos de ribera a la
izquierda junto al río, en apenas tres kilómetros nos plantamos en
la plaza de la iglesia de la Invención de la Santa Cruz.
Enseguida dimos con la calle La Unión donde teníamos concertada visita al Museo de los Mares Paleozoicos; visita que resultó de lo más placentera debido no solo al contenido del museo si no a las fluidas explicaciones de Zarela, la paleontóloga que nos hizo de experimentada ciceron, claro que eso en una argentina tiene poco mérito, lo del verbo fácil, digo.
Una explicación sobre los mares paleozoicos
Fue tal la química que surgió con Zarela, que ya y fuera de programa, nos enseñó gustosa todo el pueblo e incluso terminamos descubriendo una amiga común, Leonor.
Con el propósito de volver, para visitar el museo más detenidamente abandonamos Santa Cruz despidiéndonos de nuestra anfitriona.
MONFORTE DE MOYUELA
Ramón Berenguer IV concedió carta de población en 1157.
Ramón Berenguer IV concedió carta de población en 1157.
Población: 63 hab. (2014)
Altitud: 1008 m.s.n.m
La más absoluta soledad nos acompañó en nuestro paseo por el pueblo, se diría que sus habitantes se escondieran para no ser vistos, sin duda a estas horas estarían viendo la sesión de tarde de cualquiera de las múltiples cadenas de TV que ahora nos retienen en casa.
Así que desde la calle Fuente, nos dirigimos calle Prado arriba hasta la iglesia pasando por el ayuntamiento, la plaza Vieja y la Placeta, hicimos las fotos de rigor y nos volvimos sin tocar nada, hasta la fuente y el parquecito que la circunda.
Lanzuela está situada en las suaves cuestas donde nacen en su vertiente noroccidental las sierras de Cucalón y Oriche, alrededor de su casco urbano campos de cultivo de cereales y al norte del término, bosques de pinos y encinares.
Los
5 Km. que separan Loscos de Moyuela, están unidos por una carretera
todavía sin asfaltar, lo que nos sorprendió, pues es la primera vez
que esto ocurre; lo más parecido fue en nuestro primer viaje, que
para ir a Abejuela sin salir de Aragón, también hay que ir por una
pista sin asfaltar, pero dando la vuelta por la provincia de Valencia
se puede ir por carretera asfaltada. Aquí no, pues el acceso por
Huesa adolece de la misma carencia. Por lo demás el viaje
transcurrió por tierras llanas cultivadas y en las faldas de la
Sierra de Oriche, pinos laricios, coscojas y romeros.
Casi las cuatro de la tarde eran cuando empezamos a andar por las desiertas calles de Loscos, pues a plena hora de la siesta no cabía esperar otra cosa; a pesar de todo encontramos los transeúntes justos para indicarnos los lugares por los que preguntamos,
así que en apenas una hora, reposadamente, terminamos nuestro recorrido ya en las afueras camino de Bádenas, donde se ubicaba la ermita y fuente de San Roque que fueron las últimas construcciones que visitamos
Tomamos
un refrigerio en los bajos del ayuntamiento, donde estaba el bar del
pueblo, mientras esperábamos a la señora que guardaba las llaves de
la iglesia que amablemente se ofreció a enseñarnos, al vernos
llegar.
En
la iglesia algún viajero se atrevió desde el púlpito, a entonar un
breve pasaje del réquiem de Fauré (perdón, ejem... ).
La
misma señora nos acercó a la ermita de la virgen de Belén que no
pudimos ver por no disponer de la llave, bueno si, la vimos por un
portillo a modo de confesión.
Pero Monforte todavía nos deparaba una rareza aún mayor, pues indagando por la ermita del Santo Sepulcro fuimos a dar con el propietario de la misma que no sabía ni que se llamaba así, ni quien de sus antepasados la compró, lo único seguro es que la empleaba de garaje, (la chillona puerta verde lo delataba) y almacén. Después en Zaragoza leímos en la Xilocapedia:
"Fue construida a expensas de un matrimonio de la localidad entre 1786 y 1791, previos los correspondientes permisos del Arzobispado. Los mismos se comprometieron a mantener el culto en ella, haciendo las necesarias previsiones a tal fin. Hoy sirve de almacén, cochera y palomar y presenta modificaciones en la fachada."
LOSCOS
La primera mención se halla en la Carta Puebla de Monforte, de 1157, en que el lugar se denominaba Luscan, si bien parece que la actual ubicación procede de las repoblaciones efectuadas a mediados del siglo XII por el Conde Ramón Berenguer (Xilocapedia)
Gentilicio: Losquino
Altitud: 981 m.s.n.m
Población: 154 hab. (2014)
Abandonamos
Monforte por donde habíamos venido, y nada más llegar a Loscos nos
dirigimos al Mesón del Cazador,- que ya habíamos
situado en nuestro anterior paso por la población- donde teníamos
reserva para comer.
Siento
no poder ofreceros la foto tradicional de los comensales a la mesa,
pero se nos olvidó hacerla y es que poco a poco vamos cumpliendo
años...
La
comida casera estuvo bien, pero debo destacar dos cosas, una que es
el lugar más económico en el que hemos comido de todos nuestros
viajes, y por tanto la consabida relación calidad/precio fue
excelente; y dos, la amabilidad casi cariño, con el que nos
atendieron el matrimonio que regenta el establecimiento y su
adolescente hija.
No
dudéis en comer allí si os acercáis por la comarca.
BÁDENAS
Orígenes en la Reconquista
Gentilicio: Badenense
Población: 19 hab. (2014)
Altitud: 998 m.s.n.mLa más absoluta soledad nos acompañó en nuestro paseo por el pueblo, se diría que sus habitantes se escondieran para no ser vistos, sin duda a estas horas estarían viendo la sesión de tarde de cualquiera de las múltiples cadenas de TV que ahora nos retienen en casa.
Así que desde la calle Fuente, nos dirigimos calle Prado arriba hasta la iglesia pasando por el ayuntamiento, la plaza Vieja y la Placeta, hicimos las fotos de rigor y nos volvimos sin tocar nada, hasta la fuente y el parquecito que la circunda.
Ya a la salida del pueblo camino de Lanzuela, pudimos ver la reproducción de una antigua calera, una especie de horno al aire libre realizado con paja, tierra y leña, para hacer carbón vegetal, que se construyeron en Bádenas hasta los años sesenta
LANZUELA
El municipio tuvo su origen en la Reconquista, apareciendo citado por primera vez en el año 1205
Gentilicio: Lanzuelano
Población: 30 hab. (2014)
Altitud: 1010 m.s.n.mLanzuela está situada en las suaves cuestas donde nacen en su vertiente noroccidental las sierras de Cucalón y Oriche, alrededor de su casco urbano campos de cultivo de cereales y al norte del término, bosques de pinos y encinares.
En la plaza de la iglesia se concentra toda su arquitectura relevante, destacando la construcción en tapial de la iglesia de San Julián, curiosa la fotografía de poniente comparada con la oriental, ¡que diferencia de colores en fotos hechas a la misma hora!.
Con la tarde apagándose ya, regresamos a Zaragoza escuchando este canto al mes de Marzo, que nos ha devuelto por estos caminos.
Ya viene Marzo con flores (J.A. Labordeta)
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